Los préstamos rápidos tienen muchas ventajas que, sin duda, debemos considerar a la hora de obtener financiación. En momentos puntuales, se nos presentan emergencias que llevan a que tengamos que obtener dinero de una forma fácil y rápida.
Así, los préstamos destacan por su flexibilidad en las cuotas, puesto que existe una cierta libertad en cuando a la determinación de las distintas cuotas y plazos de devolución que debemos de tener en cuenta.
Estos créditos y préstamos rápidos son bastante favorables a situaciones en las que podemos necesitar financiación, como el cubrir el cuanto cuesta amueblar un piso o cubrir la rotura inesperada del coche, entre otras razones.
Sin embargo, puede llegar a ocurrir que no podamos hacer frente a la devolución en la fecha fijada. Las prórrogas de los préstamos rápidos son bastante habituales, puesto que, en ocasiones, nos surgen imprevistos que hagan que tengamos que aplazar el pago.
¿Cómo prorrogar los préstamos rápidos?
En estas prórrogas, por parte de los prestatarios, pueden ser ofrecidas varias alternativas, como pueda ser el cambio de la fecha de devolución del préstamo o crédito rápido. No obstante, es preferible no llegar a esta situación, puesto que siempre se ven implicados el pago de comisiones y costes adicionales que, en un principio, no estaban planificados.
Así, tras solicitar la carta de prórroga de este préstamo o crédito rápido, esta cantidad de intereses a abonar, fruto del aplazamiento, irá relacionada proporcionalmente al número de días en el que el pago es prorrogado.
¿Qué aspectos hay que tener en cuenta en la prórroga?
A la hora de prorrogar los préstamos rápidos, es importante tener en cuenta una serie de aspectos que determinarán si realmente nos interesa realizar o no este aplazamiento en el pago de nuestro préstamo o crédito rápido.
En relación al plazo de días, en los que estos se pueden prorrogar, dependen de cada entidad. Normalmente, estas suelen dar de plazo de entre 7, 14 o 30 días para su devolución, aunque es cierto que hay algunas que pueden llegar a ofrecerte un máximo de 90 días.
No obstante, es preciso mencionar que, en cuanto mayor sea el plazo de devolución, más cantidad de intereses habrá que pagar, por lo que debemos encontrar el equilibrio que necesitemos y nos pueda venir bien en base a nuestros objetivos.
Asimismo, un aspecto a tener en cuenta es las condiciones que establezca cada entidad, como pueda ser el número máximo de veces que permita la posibilidad de prorrogar un préstamo. Normalmente, esta suele ser de entre 1 y 2 veces como máximo, por lo que hay que tenerlo en cuenta si nos conviene en la actualidad o dejar esta oportunidad para un futuro.
Por tanto, solicitar la carta de prórroga es una opción considerable a tener en cuenta si sucede cualquier imprevisto. Así, esta opción nos permite aumentar nuestra tranquilidad, aunque esto suponga un mayor pago de intereses.
¿Cuáles son las ventajas de estos préstamos rápidos?
La posibilidad de tener prórrogas en los pagos hace que, aún más, obtener financiación, a partir de estos préstamos y créditos rápidos, sea atractivo para cubrir imprevistos y emergencias que debamos a hacer frente en nuestra rutina diaria.
Flexibilidad
Los préstamos rápidos son caracterizados por su gran flexibilidad, puesto que existe cierta libertad para planificar el pago de las cuotas, así como también de los plazos de devolución (incluyendo la posibilidad de las prórrogas, aunque ello acarrea un aumento de intereses).
Facilidad en el cobro
Obtener financiación a través de estos instrumentos financieros hace que obtener dinero sea mucho más fácil. Además, se puede acceder a estos a pesar de figurar en listas como la ASNEF, Rai o Cirbe, entre otras.
Sin nómina ni aval
Asimismo, no es necesario presentar nómina ni aval, por lo que es necesario una menor cantidad de documentación, haciendo el trámite de obtener dinero mucho más rápido, fácil y accesible para muchas más personas. Tan solo, es necesario presentar una documentación de los ingresos recurrentes (prestación de desempleo, jubilación, etc.)
Rapidez en los trámites
Estos préstamos y créditos se consideran una buena forma de obtener efectivo si es necesario de forma urgente, puesto que en tan solo 10 minutos podrás tener el dinero en tu cuenta listo para ser usado tras la solicitud ser aprobada.
Comodidad
Desde casa y sin tener que desplazarnos a ningún banco. Hoy en día, gracias a Internet, podemos solicitar estos préstamos sin necesidad de tener que movernos, haciendo que el proceso sea cómodo y fácil para todas las personas.
Además, una gran ventaja que hay que tener en cuenta es que existen muchos prestatarios que ofrecen su primer crédito sin intereses ni comisiones, con lo cual estos préstamos pueden salirte gratis y poder cubrir roturas de electrodomésticos, coche o hacer alguna reforma al hogar.
En conclusión, los préstamos y créditos rápidos se caracterizan por tener una gran flexibilidad, permitiendo así la prórroga en su abono, aunque esta pueda acarrear incremento de intereses.