El NIF es el número de identificación fiscal que permite identificar tanto a las personas físicas (DNI, NIE o NIF) como jurídicas, y así poder realizar numerosos trámites, como es la gestión del ERTE. Pero, ¿en qué se diferencian? ¡Descúbrelo ahora!
Con respecto a las personas jurídicas, el NIF está compuesto por una letra, siete números y un dígito de control. Esta comienza con una letra que permita identificar la forma jurídica de la empresa, que puede ser A (de sociedad anónima), B (sociedad de responsabilidad limitada), N (entidades extranjeras), Q (organismos públicos) o F (cooperativas), entre otras muchas opciones.
Sin embargo, con respecto a las personas físicas, podemos encontrar el DNI, NIE o NIF, en función de la situación de cada persona. A continuación, entenderás las principales diferencias:
En primer lugar, el DNI (Documento Nacional de Identidad) identifica, de forma general, a las personas físicas de nacionalidad española. Este está formado por ocho números y una letra y es emitido por el Ministerio del Interior de España. El DNI es obligatorio para aquellas personas físicas que superen los 14 años de edad.
Con respecto al NIE (Número de Identidad de Extranjero), este permite identificar a los extranjeros en España y así poder realizar una multitud de trámites, coincidiendo con el NIF. Este se compone de siete números más un carácter de control y se podrá tramitar personalmente a la Dirección General de la Policía o en el exterior, en las propias Oficinas Consulares de España.
En tercer lugar, con respecto al NIF, el órgano competente es la Administración Tributaria e identifica a españoles residentes extranjeros (NIF L), menores de 14 años y residentes españoles (NIF K) y a extranjeros que no dispongan del NIE (NIF M).
El NIF es indispensable en nuestro país. Te permite realizar numerosos trámites, como es tramitar todo lo relacionado con el ámbito laboral, como son los ERTE y realizar cualquier tipo de trámite de cualquier ámbito.
¿Cuáles son las necesidades que cubre el NIF?
El NIF, además de permitir identificar a la persona física o jurídica, cubre otras necesidades:
Cualquier trámitetributario y fiscal
Operaciones con entidades financieras
Ayudas o subvenciones
Laborales
Viajar
Alquiler y compra de coches
Empadronamiento y escrituras
Para cualquier trámite tributario y fiscal es necesario el NIF, como pueda ser la presentación de pago de impuestos, estados financieros, relación de ingresos, etc.
Asimismo, también es necesario para cualquier operación que desees realizar con una entidad de crédito, como pueda ser planes de pensiones, créditos, préstamos, cuentas de ahorro, etc.
Además, para poder adquirir las distintas ayudas o subvenciones, también te resultará necesario e indispensable tener un NIF, y así poder acogerte a estas.
Asimismo, para poder darte de alta en la seguridad social y poder ejercer en un trabajo ( y así obtener un contrato laboral), es clave que tengas activo el NIF que te identifique.
Aunque resulte obvio, para poder salir y entrar al país así como para movernos entre las comunidades nos es necesario tener este documento activo que permita identificarnos.
Para todo lo relacionado con los vehículos, como pueda ser su alquiler (tanto a nivel nacional como internacional) o su adquisición, es necesario tenerlo activo.
Cuando vas a adquirir una vivienda o empadronarte en una casa, es necesario que tengas activo el NIF para realizar cualquier trámite relacionado con este ámbito.
Por tanto, ahora ya conoces lo que debes saber sobre el NIF, así como sus principales diferencias y en qué necesidades es necesario. Así, es muy importante poder identificarnos para poder realizar trámites que son esenciales en nuestro día.